<div class="ebd-block " data-type="text" ><p><span>Una realidad en crecimiento:</span></p><p>Las enfermedades cardiovasculares son patologías en las que se registran los niveles más altos de investigación e inversión en los países más desarrollados. En nuestro país de igual forma, al disminuir las muertes por causas violentas han ido repuntando estas patologías como las principales causas de morbimortalidad en toda la población. Por esta razón se ha dado un importante crecimiento en Colombia y específicamente en Medellín de unidades orientadas al cuidado de pacientes cardiovasculares. La Clínica El Rosario empezó hace varios años su labor de crear y fortalecer un grupo dedicado a estos pacientes y tiene hoy en día nombre y prestigio por los buenos resultados obtenidos.</p><p>Teniendo como punto de partida los excelentes resultados obtenidos en las patologías de corazón de adultos y atendiendo a la necesidad de la comunidad, se decidió implementar el programa de cirugía cardiovascular pediátrico para el manejo de niños con problemas congénitos y adquiridos del corazón. Para este propósito se conformó un grupo multidisciplinario encabezado por los cirujanos cardiovasculares altamente calificados.</p><p>Así mismo, la Clínica El Rosario ha venido implementando la tecnología y los equipos necesarios para la atención de estos pacientes que en general tienen varias comorbilidades, lo que hace necesario un manejo integral. Desde noviembre de 2011 cuando se realizó la primera intervención quirúrgica a corazón abierto en un niño de 8 meses con un defecto del septo interventricular, el grupo ha ido madurando y creciendo bajo los principios de responsabilidad y ética en la atención de los niños cardiópatas.</p><p>Poco a poco se ha incrementado la complejidad de las intervenciones realizadas y el tipo de pacientes tratados (incluyendo bebés muy prematuros) y aunque hay aún algunas patologías que no se manejan en la institución, se espera que tras los buenos resultados obtenidos se pueda ampliar el cubrimiento a cardiopatías cada vez más complejas. </p><p>Los pacientes con enfermedades cardiacas ingresan a la Clínica por diferentes servicios: por la consulta externa casi siempre por síntomas referidos por el niño y sus familiares como dolor en el pecho, palpitaciones o cansancio frecuente; por el servicio de urgencias cuando se presenta un evento súbito como síncope o cianosis (coloración violácea de la piel ); remitidos de otras instituciones para evaluación por cardiología pediátrica o cirugía cardiovascular pediátrica o porque nacen en la institución (servicio de maternidad) y en las primeras horas se hace la sospecha de un problema cardiaco.</p><p>Se inician las medidas para compensar y estabilizar a estos pacientes en el servicio receptor y posteriormente son evaluados por cardiología pediátrica quien determina si el paciente necesita manejo médico, quirúrgico o un procedimiento intervencionista endovascular y si además son necesarios estudios de mayor complejidad para hacer un diagnóstico adecuado. </p><p>Cuando se determina que un paciente necesita manejo quirúrgico se cita a un staff médico quirúrgico a todas las partes que puedan tener injerencia en el caso y se consideran las condiciones actuales del paciente, los requerimientos médicos, de tecnología e infraestructura que va a necesitar y se determina si el paciente puede ser intervenido en la institución o debe ser referido; así mismo se considera la estabilidad del paciente tras el manejo inicial y se determina el momento óptimo de la intervención ya que en muchos casos los pacientes llegan referidos a la Clínica por un proceso infeccioso y la cirugía debe postergarse hasta que la infección haya sido tratada completamente.</p><p>Cuando el paciente está en las condiciones adecuadas se programa la cirugía cardiaca. Esta programación implica la coordinación de todo el personal quirúrgico y de apoyo, las condiciones de personal y tecnología necesarios en salas de cirugía y en las unidades de cuidado intensivo, así como la aprobación y condiciones de acompañamiento suficientes del paciente y su familia.</p><p>Con estos resultados y con la firme intención de seguir aumentando el volumen y complejidad de las intervenciones realizadas, la institución continúa fortaleciendo el grupo de cirugía cardiovascular pediátrica con entrenamientos y capacitaciones periódicas, dentro y fuera del país, con la adquisición de nuevas tecnologías y con establecimiento de nuevos convenios con las diferentes aseguradoras de salud para lograr una cobertura más amplia de la población vulnerable y evitar que niños con cardiopatías tratables, lleguen en estados terminales de su enfermedad donde ya no hay mucho por hacer.</p><p><em data-redactor-tag="em">Artículo elaborado por: </em></p><p><em data-redactor-tag="em">Dr. Juan Camilo Jaramillo (Cirujano Cardiovascular)<br></em><em data-redactor-tag="em">Dr. Alejandro Ramírez (Cirujano Cardiovascular)<br></em><em data-redactor-tag="em">Dra. Tatiana Padilla (Cardióloga Pediatra)&nbsp;</em></p></div>